Con la excusa de sacar del mercado los productos dañinos para la salud del consumidor se impulsa una iniciativa de ley que podría perjudicar a las empresas guatemaltecas.
Para Mi Gente Informa, Vinicio Ramírez, desde Ciudad de Guatemala
La iniciativa de Ley de Promoción de Alimentación Saludable fue presentada por el diputado de la Unidad Nacional de la Esperanza -UNE- Jairo Flores, miembro del Frente Parlamentario contra el Hambre, el 3 de octubre de 2,018. Esta ya tiene un dictamen favorable de los dos que necesita.
El fin de esta iniciativa es la prevención de enfermedades no transmisibles como la hipertensión, el cáncer, diabetes, obesidad y otras, y responde al rumbo que instancias como la Organización Mundial de la Salud demandan a los países. Pero la Comisión de Salud del Congreso realiza el análisis y las consultas pertinentes para determinar si con esta normativa se logrará el objetivo que se pretende.
Diferentes sectores involucrados consideran que esta normativa no logrará el objetivo y por lo tanto plantean realizar mesas de trabajo para buscarle alternativas y buscar consensos que no perjudiquen a las empresas guatemaltecas y que sean de beneficio para los compradores, porque como está planteada impactaría en el precio final de los productos nacionales.
Confusión
Inicialmente se dijo que el objetivo de la iniciativa era proteger el derecho de la salud, por medio de la creación de un marco jurídico que prohibirá una serie de acciones de los fabricantes. En el artículo 2, de la iniciativa 5504, dispone la aplicación al etiquetado de todos los alimentos preenvasados en todo el territorio nacional, es decir que deberán contar con un octógono con información de sobre el producto, pero deberá llevarlo en la parte delantera para ser visible a la persona que lo comprara.
En el artículo 11 de la Iniciativa de Ley señala que todo producto que contenga cuatro o más sellos de advertencia nutricional tendrá”PROHIBICIÓN DE LA PUBLICIDAD Y PROMOCIÓN DIRIGIDA A MENORES DE 18 AÑOS DE EDAD”.
“La ley habla de otras prohibiciones que la competencia extranjera no tiene, por lo cual la industria guatemalteca se enfrentaría a una competencia desleal, pues los demás empaquetados o preenvasados sí podrían realizar publicidad por todos los medios a sus alcance, esto generaría pérdidas económicas inmediatas” refirió Ramiro Pérez, Presidente de la Asociación de Desarrollo Lácteo, ASODEL.
Ramiro Pérez agregó que restringir la publicidad de ciertos productos no tiene razón de ser, porque la compra de los productos no es determinante para los consumidores, quien debe tener hábitos saludables de consumo.
“Esta ley va dirigida contra los productos preenvasados en Guatemala. Por ello, se ha realizado ya una presentación ante los parlamentarios sobre nuevas alternativas que existen que tomar en cuenta”, completó.
“No estamos en contra de una ley saludable, pero la que se conoce en el Congreso dañará los ingresos económicos de las empresas y además afectará la relación internacional con países de Centroamérica, debido a que existen convenios que regulan los sellos en referencia y si los cambian no se venderían en la región”, finalizó Pérez.
Daño a las exportaciones
Los empresarios ven que de ser aprobada esta iniciativa tendrían que hacer un etiquetado para Guatemala y otro diferente para exportar, de entrada eso subiría los costos de producción, por lo tanto los precios ya no podrían ser tan competitivos. El encarecimiento se los productos abre paso al incremento del contrabando que tanto daña a la industria local.
La industria de alimentos y bebidas es un sector importante en las exportaciones generales de Guatemala, pues representa el 16% del total, siendo su principal mercado es Centroamérica.
Comisión de Salud señala que se pretenden motivar las buenas prácticas
“De acuerdo con diputados de la Comisión de Salud, la iniciativa va encaminada a generar mejores prácticas de alimentación en la población, bajo el conocimiento del contenido de los alimentos que están consumiendo y así se genera la obligatoriedad de las empresas que distribuyen alimentos de etiquetar con claridad el contenido energético del producto que se está vendiendo”, dijo el Presidente de la Comisión de Salud del Congreso de la República, Diputado Orlando Blanco.
Para Enrique Lacs, Director Ejecutivo de la Cámara Guatemalteca de Alimentes y Bebidas (CGAB) el nuevo etiquetado que se pretende implementar no brinda información verídica al consumidor, solo advierte de riegos infundados que vendrían confundir a los compradores, además las advertencias que se quiere que se pongan no están sustentadas técnica ni científicamente.
El trasfondo es controlar que se utilicen ciertos ingredientes que eviten la obesidad y por ende las enfermedades que estos generan. Sin embargo, los alimentos procesados no provocan problemas a la salud, son los hábitos de alimentación inadecuados de las personas.
“Los productos no son los responsables de la adicción y las personas se hacen adictas a ciertas cosas, pero son los hábitos los dañinos, no los alimentos”, sostiene Enrique Lacs.
Por otra parte, Orlando Blanco menciona: “No creemos que la iniciativa motive el incremento al precio del producto, en otros países donde se tienen leyes como esta promueven LIBRE DE ETIQUETA como un plus a los productos que han mejorado el contenido proteico, se busca disminuir el consumo de los productos que no son saludables para la salud de los guatemaltecos”.
Pero para Ramiro Pérez la iniciativa con sus nuevas tasas impositivas al sector de alimentos y bebidas, encarecerá los productos guatemaltecos que afectará a los consumidores.
Entre los principales motivos que encontró la Comisión para emitir el primer dictamen favorable a la iniciativa, están las estadísticas del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), que determinan que en el país existen alrededor de cuatro millones de personas con enfermedades crónicas como diabetes o hipertensión, producidas por la mala alimentación.
Asimismo, los artículos del 15 al 20 del capítulo IV, obliga a las empresas a colocar sellos de advertencia nutricional al frente de los productos que comercialicen, la cual es determinada como una medida regulatoria de salud pública, que va dirigida a su consumidor y que contendrá textos como: “alto en azúcares, alto en grasas saturadas, alto en sodio, contiene grasas trans”, entre otros.
“Los hábitos de alimentación son los responsables de la salud de las personas, y por lo tanto, es importante que hayan campañas que motiven la buena alimentación y los consumos saludables y correctos”, aclaró Lacs.
Los socios de la Cámara Guatemalteca de Alimentos y Bebidas -CGAB- han señalada que iniciativa de ley es carente de fundamento científico, técnico y económico, por ello desde entonces se han reunido con representantes de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO siglas en inglés) Organización Mundial para la Salud (OMS) Organización Panamericana de la Salud (OPS) así como con el Instituto de Nutrición de Centroamérica y Panamá (INCAP), sin haber obtenido un respaldo al sector. También se han reunido con diferentes diputados para presentar opciones de etiquetado, pero se desconoce si estas serán tomadas en cuenta.
