En redes sociales se ha dado a conocer una serie de reformas secretas que el gobierno de Alejandro Giammattei pretende implementar desde la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT). Estas medidas, vendrían en detrimento de los guatemaltecos y otorgarían poderes para invadir la privacidad de los contribuyentes. Darían también acceso irrestricto a información personal y aumentarían los montos de algunos impuestos. Este sería el regalo de despedida de Alejandro Giammattei.
La denuncia ha circulado por las redes sociales, grupos de abogados y economistas han dado la alerta, advirtiendo sobre lo que secretamente está pactando el gobierno con una rama del sector empresarial. Se trata de una serie de reformas tributarias acordadas en un contrato de confidencialidad. Conocida como la #Iniciativa6165, la serie de medias se han negociado en total secreto y con la excusa de recabar más fondos para el gobierno se impulsa fuertemente.
De acuerdo con detractores de las reformas se han planteado bajo la premisa de necesitar fondos “a efecto que el
Estado de Guatemala cuente con los recursos necesarios para costar los servicios que la población requiere para lograr el bien común.” Mismos que aducen los opositores, servirían para proyectos como el de el libramiento de Chimaltenango o la construcción de escuelas. “Mire aquí el tema es que dicen necesitar más dinero, pero en realidad pareciera que no tienen suficientes fondos para llevárselos a sus bolsas”, asegura un economista que prefiere no dar su nombre por miedo al terrorismo fiscal.
Algunos puntos complicados de la reforma tributaria
Según los opositores y analistas una de las medidas más graves que contemplan estas reformas es otorgarle a la SAT facultades para realizar espionaje. Tales como el poder de instalar equipos y sistemas informáticos especializados en los equipos de los contribuyentes para monitorear sus actividades. Incluso contempla acceso a las bases de datos de empresas y particulares, es decir listados de clientes, proveedores y hasta costos de producción.
Incrementa el pago del Impuesto Sobre la Renta (ISR), anulando el régimen simplificado del 5 por ciento y lo eleva, de manera permanente al 7 por ciento sobre cualquier monto. A decir de los opositores a las nuevas medidas, esto es inviable, pues los pequeños comerciantes se verán afectados de forma directa. “Imagínese, una vendedora de refrescos tendrá que pagar más impuestos, mientras que los grandes evasores en los puertos no pagan un centavo, eso es una injusticia, deberían ordenar primero las aduanas y combatir la evasión”, asegura.
Por si fuera poco, y con una baja recaudación, la nueva medida pretende impedirle a un contribuyente emitir facturas en caso se atrase en sus impuestos. Según los opositores, la SAT podría impedirle a una persona o empresa la emisión de facturas electrónicas en detrimento de su capacidad de trabajar y generar fondos. Además, pretende modificar la Ley de Actualización Tributaria, de forma que todas las sociedades o personas que pertenezcan a un mismo grupo empresarial deban estar en el mismo régimen de pago de ISR.
Ante las medidas contempladas en la #Iniciativa6165, también han manifestado su oposición entidades como el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI). Según este, existen numerosas falencias técnicas y se hace necesario un análisis transparente y técnico. “insta al Ministerio de Finanzas Públicas (Minfin) y a la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) a estudiarla cuidadosamente y emitir opinión o dictamen sobre las implicaciones de su aprobación.”
Para los opositores antes de comenzar a discutir los cambios que pretende la SAT, es necesario saber que fue lo que se pactó en el acuerdo de confidencialidad pactado entre SAT y el sector empresarial. “Tenemos derecho a saber que se está negociando y luego como puede afectar esta medida la economía del país.
Lo cierto del caso, aseguran los detractores, la implementación de estas medidas podría tener un efecto negativo en la economía nacional. Pues de estar en la legalidad, muchos pequeños comerciantes preferirán pasarse a la informalidad para evitar el pago de impuestos. “No es ciencia, si usted paga impuestos y no tienen medicinas en los hospitales o se cae a pedazos una mega obra como el libramiento de Chimaltenango, seguro que prefiere no pagar y así evitar que se lo lleven a las bolsas los funcionarios”, concluye.
Iniciativa final
Hola Andreita, acá te mando el post de la nota Así acabará con la economía Alejandro Giammattei que se publicará el miércoles 19 de abril