Durante esta semana fue presentado el documento “Llegar a cero embarazos en niñas y adolescentes – Mapa El Salvador 2020” realizado por el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), el cual hace un recuento de una cruenta verdad, la violencia sexual del país afecta y trunca el futuro de mujeres y niñas de El Salvador, debido a que según el informe del 2015 al 2020, son 105,930 las féminas entre la edad de 10 a 17 años que han dado a luz.
Para Mi Gente Informa, Jorge Solís desde San Salvador, El Salvador.
Para el Fondo de la Población de Naciones Unidas esta realidad en El Salvador es tétrica, y lamentable, debido a que los embarazos de adolescentes en su mayoría provienen de abusos y violaciones sexuales de parte de miembros cercanos de sus propias familias, vecinos, amigos y por pandilleros, quienes han implantado una cultura de violación en el pequeño país de Centroamerica.
Según la UNFPA, es necesario que se empiecen a tomar medidas más duras, y más fuertes, para evitar las violaciones y abusos sexuales en El Salvador, ya que las autoridades han fallado en dictaminar sentencias para llevar a la carcel a estos malhechores, por si fuera poco, muchos de ellos nunca son atrapados debido a que las fuerzas policiales no persiguen este delito.
Así mismo, los procesos que se llevan a cabo por las autoridades re victimizan a las mujeres, jóvenes y niñas, esto ha causa que deben de pasar por procesos médicos para detallar el alcance del abuso, y también por cuestionamientos de parte de los fiscales y policías, lo que genera una problemática aún mayor.
La violencia sexual destruye y trunca la vida de las niñas y jovenes en El Salvador
Según el informe, la violencia sexual “destruye futuros” esto debido a que las niñas y jóvenes madres, tienen altas tasas de diserción estudiantil, bajo rendimiento academico, desarrollo de problemas psicologicos, enfermedades de transmición sexual, matrimonios forzados, y muchas variables que sumen a la mujer a una condición de pobreza y sumición.
Otra de las variables que más llama la atención del informe, es la alta tasa de morbilidad materno infantil, esto debido a que muchas niñas en los rangos de 10 a 14 años no están preparadas para ser madres, y mucho menos cuentan con las capacidades económicas para contratar atenciones médicas privadas, a lo que se suma la poca cobertura pública de salud.
Esto también pone en una condición única a las madres niñas, debido a que la pobreza de la región y la carente cobertura médica y el poco interés de las autoridades públicas para proteger a las futuras madres que se encuentran en los rangos de 10 a 17 años de edad, ocasiona que los bebés nazcan con problemas de desnutrición, bajos de peso, problemas psicomotores, y otra gran porción nacen muertos.
El año 2020 refleja una supuesta disminución
Según los datos recogidos por el informe UNFPA, el 2020 reflejo disminuciones en las denuncias por violencia sexual, lo cual puede ser cierto, pero tambien falso, ya que por las medidas tomadas por El Salvador para la prevención de los contagios de COVID 19, muchos servicios incluyendo las escuelas públicas, servicios de transposte y demás fueron cancelados, generando la posible “baja” en los datos.
Esto es debido a que durante el 2020, el Ministerio de Salud de El Salvador recibió 12,982 inscripciones prenatales en niñas y adolescentes entre los 10 y los 19 años, de las cuales solo el 503 pertenecieron a niñas de 14 años o menos, comparándolo con el 2019, refleja una disminución relevante.
Lamentablemente, cuando las medidas fueron retiradas por el Gobierno de El Salvador, y se permitió la libre movilidad y se abrieron los centros educativos, de transporte, salud, y demás, cosa que sucedió durante el mes de junio, se puede ver un incremento en las inscripciones prenatales de niñas de 10 a 14 años, lo que hace suponer que sus familias prefirieron no acudir a los establecimientos de salud o tuvieron limitaciones para hacerlo durante el periodo de confinamiento, procediendo a la inscripción una vez levantadas las medidas de restricción por la pandemia del COVID-19.
Siendo entonces, importante recalcar que muchas niñas en los rangos de 10 a 19 años de edad quedaron atrapadas con sus agresores sexuales, lo que terminó en un repunte en los dos últimos trimestres del 2020 en embarazos de menores en El Salvador.
Una nueva masculinidad es necesaria
Para la UNFPA, es necesario no solo mejorar los servicios legales, de justicia y servicios médicos en El Salvador para atender a niñas víctimas de violencia sexual y abusos sexuales, si no que es necesario reeducar a los niños, jóvenes y hombres varones, de que abusar de las mujeres no es normal ni una causa o razón de hombría. Ya que, según los datos recogidos, es casi hasta un 94% de hombres los que son agresores y un 6% que no pudieron ser identificados. Otro dato relevante, es que en toda Latinoamérica, durante el 2020, los servicios de ayuda telefónica de las Policías de cada país, registraron un repunte del 80% denunciando agresiones sexuales contra mujeres de parte de familiares, amigos y demás personas que viven con la víctima. Lo que deja entrever la cruenta realidad de ser mujer o niña en Latinoamérica.