Sonrisas que no volverán por culpa de la violencia e indiferencia

Para Mi Gente Informa

Mauricio Flores, desde Ciudad Guatemala

La violencia intrafamiliar contra menores de edad es una realidad en el país, sobre todo por el confinamiento provocado por la pandemia del Covid-19. El encierro, la restricción de movilidad, la incertidumbre, el estrés y la presión por la situación económica, la educación a distancia de manera improvisada, entre otros factores, causan situaciones difíciles para los miembros de las familias en distintos contextos, incrementándose la vulnerabilidad y exposición de los niños y adolescentes.

Según registros del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), en los primeros dos meses de 2021 casi medio centenar de niños fallecieron de manera violenta en el país.

De igual manera, el informe “Violencia Contra la Niñez y la Adolescencia: Descripción de Algunas Prácticas de Violencia a Partir de Registros Administrativos”, publicado en marzo de este año por la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), indica que en Guatemala, entre enero y agosto de 2020, fueron registradas 4 mil 808 víctimas de maltrato infantil, lo cual representa una tasa de 61 niños y adolescentes por cada 100 mil habitantes menores de edad. Las cifras de víctimas de delito de maltrato contra personas menores de edad fueron más altas en el caso de los hombres durante este período.

El Ministerio Público (MP), informó que entre los meses de enero a agosto de 2020, el mayor porcentaje (22%) de víctimas de delito por maltrato contra personas menores de edad fueron registradas en el departamento de Guatemala, seguido de Alta Verapaz, con 9%, Huehuetenango y Escuintla, con 7%.

Altos índices

El estudio de la PDH también indica que en el primer semestre del año de pandemia (marzo-agosto 2020), se confirmaron 322 suicidios, de los cuales 42 (13%) fueron llevados a cabo por menores de edad. De éstos el 12% corresponden a víctimas de entre 12 y 17 años, mientras que el 1% fueron niños y niñas menores de 12 años.

La violencia contra niños, niñas y adolescentes se expresa por medio de la violencia física, sexual, psicológica, omisión o trato negligente.

Los datos recopilados por la PDH en varias instituciones, indican que en 2019 la cifra de homicidios alcanzó los 3 mil 578. De éstos, el 9.2%  de las víctimas fueron menores de edad, mientras que en 2018 se cometieron 3 mil 887 crímenes, de los cuales el 7.8% de las víctimas eran niños, niñas y adolescentes.

El informe explica que a nivel departamental, Guatemala ocupa el primer lugar en homicidios cometidos contra menores de edad en el período de enero a agosto de 2020, con el 39%. Le siguen Escuintla, 8%; Chimaltenango, 7%; Izabal y El Progreso, 6%;  Petén y Quetzaltenango, 5%.

Por su parte, en el mismo período de 2020,  el Inacif informó que realizó 108 necropsias en niños, niñas y adolescentes, quienes fueron víctimas de muertes violentas causadas por arma de fuego. De estos decesos, el mayor porcentaje se concentró en el departamento de Guatemala, con 43%; seguido de Escuintla, 9%; Chimaltenango, 8%; Zacapa y Quetzaltenango 6% cada uno.

La Fiscalía de la Niñez y Adolescencia del MP, dio a conocer que el total de denuncias recibidas del 18 de junio de 2019 para el 8 de marzo de 2021, fue de 4 mil 990, de las cuales 38% corresponden a niños desaparecidos; 22% a violencia sexual y el 40% a maltrato en contra de la niñez.

Víctimas de agresión sexual

Entre enero y agosto de 2019, el Ministerio Público registró 3 mil 543 víctimas del delito de agresión sexual. Del total 39% (1 mil 395) eran niños, niñas y adolescentes, el 87% eran mujeres y el 13% hombres.

Los contextos en los que puede presentarse la violencia intrafamiliar contra menores de edad son privado (se refiere a contexto familiar u hogares de cuidado), público (son espacios en los cuales se construye y fortalece el ejercicio de la ciudadanía y la construcción de lo social, comunitario y lo político), y tecnológico (mensajería instantánea, blogs, redes sociales, mensajes de texto y dispositivos electrónicos, como tablets, computadoras, teléfonos celulares).

Para el 2020, también en el mismo período, se registraron 2 mil 750 víctimas por agresión, de las cuales el 38% (1 mil 039) eran niños, niñas y adolescentes, y de las cuales 86% fueron mujeres y 14% hombres. El departamento de Guatemala concentró el 30% de esos casos. Le siguen Escuintla con 6%, Alta Verapaz y Retalhuleu, con 5% cada uno.

Violaciones

En el caso del delito de violaciones, entre enero y agosto de 219, el Ministerio Público registró 6 mil 091 víctimas. El 46% de estas violaciones fue contra menores de edad.

La tasa de niños, niñas y adolescentes, víctimas del delito de violación, denunciadas entre enero y agosto de 2019, fue de 40 por cada 100 mil, y en 2020, en el mismo período de meses, fue de 31 por cada 100 mil, añade el informe.

En estos casos, en el 2019, 92% de las víctimas menores de edad del delito de violación fueron niñas adolescentes mujeres, y el 8% niños adolescentes varones, refiere la PDH citando datos del MP. Mientras que en el mismo período de 2020, el porcentaje de niñas y adolescentes mujeres víctimas del delito de violación fue del 93%.

Generalmente la violencia contra los niños, niñas y adolescentes es ejercida por personas conocidas con vínculos cercanos, no obstante, es necesario mencionar que ésta también puede ser realizada por personas desconocidas o grupos del crimen organizado.

La Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala (ODHAG), en su informe “Situación de la Niñez en el Contexto de Pandemia del Covid-19 2020”, indica que durante el período de confinamiento se generaron mayores niveles de violencia intrafamiliar, maltrato infantil físico, psicológico, verbal, altos niveles de abuso sexual, con todo el impacto que esto tiene en la salud mental de la niñez y adolescencia y la población en general.

Líderes de grupos que velan por la niñez en Guatemala, expresaron que es obligación del Estado garantizar la seguridad de los pequeños. Agregaron que, a pesar de que existe un Sistema de Protección de la Niñez y la Adolescencia integrado por más de 20 instituciones gubernamentales, se carece de una política nacional para la protección de los menores de edad.

La PDH aseguró que es urgente que el Estado de Guatemala observe y cumpla la Convención y las recomendaciones del Comité de Expertos de Derechos del Niño. Además, expresó que se debe brindar protección integral a la niñez y adolescencia, así como garantizar entornos seguros, desde la familia, escuela, comunidad y a nivel nacional.