El presidente Biden acusó a Trump de incitar a la toma del Capitolio y a la violencia que dejó cuatro manifestantes y un policía muertos.
Para Mi Gente Informa, Carmen Rodriguez desde Washington D.C.
Un año después de la toma del Capitolio y del intento de insurrección en Estados Unidos, el presidente Joe Biden acusó a Donald Trump de ser el responsable directo de la violencia que se desató ese día en Washington DC.
Biden habló por primera vez de forma directa sobre lo que pasó el 6 de enero del año pasado; mientras el Buró Federal de Investigación, (FBI) confirmó antes que 703 personas han sido detenidas y acusadas por este incidente.
“Por primera vez en la historia de nuestro país un presidente no solo perdió la elección; sino que también, trató de evitar la transferencia pacífica del poder… una turba violenta entró al Capitolio, pero fallaron…”, dijo Biden en cadena nacional el jueves pasado.
El 6 de enero de 2021 marcó un precedente en la democracia de Estados Unidos cuando cerca de dos mil personas entraron por la fuerza en el edificio que representa el poder en el país intentando revertir el resultado de las elecciones.
Al momento de la toma violenta, en el Congreso, los senadores habían iniciado el proceso para validar el resultado de las elecciones presidenciales. El exvicepresidente que participaba de la actividad tuvo que ser evacuado cuando los manifestantes entraron al edificio.
Según informaron las autoridades, la revuelta duró aproximadamente siete horas y dejó pérdidas y daños en el edificio histórico que suman 1.5 millones de dólares. Además, la policía confirmó que 140 agentes y custodios del Capitolio resultaron seriamente heridos.
De los 703 acusados, 167 se declararon culpables de cargos por conspiración, daños a propiedad federal y otros. Todos deberán cumplir varios meses en la cárcel, el 41% de los condenados recibieron sentencias de más de tres meses en prisión.
Las autoridades también dijeron que 140 de estas personas fueron miembros activos del ejército, de grupos de la policía del estado y ex oficiales públicos. El 62% de los individuos acusados y detenidos han sido identificados como miembros de grupos racistas y de supremacía blanca.
El FBI continúa siguiendo el rastro de otras 350 personas que han sido identificadas en fotografías o videos y también, están buscando a un sujeto que puso dos bombas en los alrededores del Capitolio.
El jueves que se cumplió un año del incidente, senadores, congresistas y activistas a favor del voto libre se congregaron para recordar a las víctimas y para pedirle a la Casa Blanca que tome acciones para evitar que otros hechos similares ocurran en las próximas elecciones de 2024.