Por Montserrat Huerta Para Mi Gente Informa
Las remesas que ingresaron al país principalmente desde Estados Unidos durante el 2020 reflejaron el apoyo de los connacionales migrantes a sus familias en Guatemala, que fueron impactadas por las restricciones que ocasionó el COVID 19 y luego por la destrucción de las tormentas Eta e Iota, los últimos meses del año.
Este es el caso de Víctor Ac, originario de Alta Verapaz, que comentó con tristeza cómo el COVID 19 acabó con la vida de su padre y luego las tormentas impactaron su vivienda.
“La situación se puso muy difícil y aún ahora hay muchas familias que no han podido recuperar sus viviendas, pero con la ayuda monetaria de nuestros familiares en el extranjero pudimos salir adelante, por lo menos en sentido monetario, aunque el dolor de la pérdida de mi padre sigue presente”, explicó.
De la misma manera, Mirna Vásquez, de Izabal, señaló que tras la tormenta Eta la vivienda de su familia quedó bajo del agua, “tuvimos que acudir a un albergue y luego buscar quedarnos con familiares en la capital, solamente el apoyo de nuestra tía que vive en Los Ángeles nos salvó de quedarnos en la calle”, añadió.
Aumenta ingreso de divisas por remesas
La ayuda que enviaron los migrantes durante el 2020, se vio reflejado en los datos del Banco de Guatemala (Banguat), donde se indicó que el total de ingresos de divisas por remesas familiares en el 2020 fue de US$11 mil 340 millones, monto superior en US$832 millones (7.9%) al monto reportado durante 2019 que fue US$10 mil 508 millones.
Al inicio de la pandemia, durante el primer trimestre del 2020, la economía tuvo un mayor impacto negativo, pues las remesas reportaron una caída, que no duró mucho tiempo pues los envíos comenzaron a incrementarse a partir de julio, reportándose desde ese mes aumentos constantes comparados con el 2019.
Guatemala vivió un confinamiento que inició en marzo y fue prorrogándose con la aprobación de Estados de Calamidad, hasta septiembre de 2020, luego de eso y cuando se esperaba que los guatemaltecos comenzaran a superar el impacto económico que causo el cierre del país, dos fuertes tormentas, Eta e Iota, destruyeron infraestructura y viviendas en 10 departamentos del Norte del país.
Importancia de los migrantes para el país
Con el paso de las tormentas Eta e Iota, el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex) solicitó al gobierno de Estados Unidos el Estatus de Protección Temporal (TPS), para evitar deportaciones de migrantes guatemaltecos, argumentando que el país no se encuentra en condiciones de brindar atención a los retornados.
Sin embargo, hasta el momento no se ha obtenido una respuesta de parte de Estados Unidos y las deportaciones continúan, pues solamente el año pasado ese país envío 21,057 guatemaltecos retornados.
El Gobierno de Guatemala reconoció la importancia de las remesas que envían los migrantes desde Estados Unidos, el pasado 18 de diciembre durante la conmemoración del Día Internacional del Migrante, en ese momento el presidente Alejandro Giammattei, agradeció públicamente el trabajo de los migrantes y solicitó de nuevo públicamente el TPS para ellos.
“Aportan trabajo, aportan experiencia, pero también aportan compromiso, aportan al desarrollo de los países de origen, y de destino y vaya que lo sabemos nosotros que, dentro de esta crisis económica, el migrante no ha dejado de trabajar y no ha dejado de ayudar a sus familias, a través de las remesas familiares”, reconoció el mandatario.
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Características de los beneficiarios de las remesas
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en su estudio “La población receptora de Remesas en Guatemala, un análisis de sus características socioeconómicas”, expuso datos relevantes de los beneficiarios en el país.
Algunos de los hallazgos fueron:
- Casi 1 de cada 10 guatemaltecos se benefician de las remesas familiares.
- 69% de los receptores de las remesas en Guatemala son mujeres.
- 88% de los hogares beneficiados son pobres o en condiciones de riesgo de caer en pobreza.
- 44% es la proporción que tienen las remesas en los ingresos familiares.
- Los receptores de remesas ocupados son más propensos a emprender un negocio propio y menos propensos a ser asalariados.