Para Mi Gente Informa por Giovanni Aldana desde Ciudad de Guatemala
Guatemala sigue sufriendo un repunte de casos de Covid desde enero pasado. Esto como consecuencia de la relajación de medidas por parte de la población durante las fiestas navideñas y de Año Nuevo.
Pese a que se ha incrementado la campaña de concientización no sólo sobre vacunación sino también acerca de las medidas de prevención, los esfuerzos gubernamentales no logran contener el avance de la pandemia.
Al 7 de febrero, apenas el siete por ciento de la población contaba con su esquema completo de vacunas, es decir las dos dosis requeridas, además de un refuerzo. Son apenas 1.3 millones de personas de 18 millones de habitantes que tiene el país.
Según datos publicados por el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), 7 millones de personas han recibido una primera dosis. De ellas, 5.2 millones se aplicaron la segunda dosis, y de estos, apenas 1.3 millones han buscado recibir la dosis de refuerzo.
Esto demuestra que las personas tampoco tienen mucho interés en vacunarse. Recién pasadas las fiestas, la población formó grandes colas en los centros de vacunación, conscientes de que se habían descuidado durante las fiestas, pero al paso de los días, ha ido decreciendo la demanda de vacunas. En un recorrido realizado para la redacción de esta nota se observó poca demanda.
Por si fuera poco, hace un par de semanas dio inicio el ciclo escolar. El mayor porcentaje de la población estudiantil lo constituyen niños menores de 12 años. De ellos, nadie ha recibido siquiera una dosis de la vacuna y las autoridades no han dado una fecha estimada para empezar a inmunizarlos.
Lo que sí hizo el gobierno, fue dejar a colegios y padres con la responsabilidad de tomar la decisión de enviar a los menores a recibir clases presenciales, sin tomar en cuenta el riesgo. Hace un par de días, las autoridades del Ministerio de Educación anunciaron que a finales de mes se haría el regreso presencial a clases.
Incremento de casos
El repunte más alto de infectados según datos del MSPAS, se dio a finales de agosto de 2021 cuando se detectaron hasta seis mil casos diarios. Para diciembre, no llegaban a mil.
Con la entrada al país de la variante Omicron en enero de este año y el relajamiento de las medidas por parte de la población, inició un nuevo repunte. En las últimas semanas se han detectado hasta cuatro mil casos diarios.
La última actualización del semáforo de alerta sanitaria, publicado esta semana, indica que existen 181 municipios en alerta roja, 85 en naranja y 74 en amarilla. Desde la implementación de este sistema, ningún municipio ha logrado estar en verde.
Al momento de redactar esta nota, las autoridades reportaban 713 mil casos confirmados desde que inició la pandemia. En la actualidad existen 4 mil 300 casos activos. La tasa de mortalidad por Covid en nuestro país es de 98 por cada 100 mil habitantes. Han fallecido cerca de 17 mil personas desde el inicio de la pandemia.
Existen cerca de 370 puestos estatales de detección de la enfermedad, además de un número similar de laboratorios privados autorizados para realizar las pruebas. Pero la cantidad de hisopados diarios aún es bajo ya sea por falta de insumos o desinterés de la población, así que las cifras oficiales no estarían reflejando la dimensión real de la pandemia en Guatemala.
Estrategias de vacunación
Las autoridades han hecho cambios en su política de inmunización con el objetivo de frenar el repunte de casos, pero también para mejorar la cobertura a nivel nacional. En algunos casos, ha hecho equipo con la iniciativa privada.
Con el programa “Qué chilero vacunarse” implementado en enero, han visitado varios puntos focales para vacunar a las personas: Chimaltenango, Santa Rosa y Sacatepéquez han sido algunos de los lugares visitados. También Nueva Concepción, Escuintla, está incluida en este esfuerzo.
Además, el Ejército de Guatemala está visitando mercados cantonales con jornadas móviles de inmunización. Y no es raro ver personal vacunando en lugares concurridos como parques y, en el caso de la capital, el Paseo de la Sexta.
Pero esto no parece ser suficiente. El crecimiento de casos parece estar llegando a su pico, y si bien, se puede dar una baja de contagios, hay factores que complicarían la eventual finalización de la pandemia.
Se acercan fechas en las que los guatemaltecos abarrotan centros comerciales, restaurantes y comercios. El 14 de febrero, Día del amor y la amistad, Semana Santa y el Día de la Madre. Recordemos que el año pasado hubo un repunte importante días después del 10 de mayo.
Además, ya se ha empezado a abrir el sector de entretenimiento. Se han anunciado conciertos masivos de artistas internacionales a partir de mayo próximo.
Si no se cuenta con medidas biosanitarias estrictas en estos eventos, podría ocurrir lo que en Puerto Rico. Después de dos conciertos del artista urbano Bad Bunny, las autoridades tuvieron que cerrar la isla debido a un repunto crítico de enfermos y que sobrepasó la capacidad de atención de los hospitales.
Y no es necesario ver fuera del país para ver otro ejemplo. En occidente, la población ha ignorado las medidas de prevención y ha asistido masivamente a conciertos y convites.
En septiembre pasado, en Sacapulas, Quiché, se realizaron cinco días de celebraciones y bailes, en los que los asistentes ignoraron las medidas básicas de prevención.
Como resultado, los servicios hospitalarios de la región vieron sobrepasada su capacidad de atención en los días posteriores. Se llegó a tener hasta un 40% de mortalidad entre los pacientes infectados por Covid en esa ocasión, reportaron autoridades del Hospital Regional de Quiché.
Es innegable que el país necesita encaminarse a encontrar cierta normalidad pospandemia y muchos sectores como el de entretenimiento, necesitan recuperarse económicamente. Pero debe hacerse con responsabilidad.
Mientras que el personal de salud hace lo que puede para motivar a las personas a vacunarse, la población debe hacer su parte también. Siguen siendo válidas y efectivas las medidas básicas de prevención.
Además de la inmunización, lavarse las manos constantemente, usar gel desinfectante, usar mascarillas adecuadas para prevenir el contagio y no de tela, así como observar el distanciamiento social. Estas siguen siendo las mejores armas que se tienen para salir pronto de la pandemia.