Los hijos de la política,  que se aferran al legado familiar

Algunos son jóvenes e inexpertos, otros se han curtido en el mundo de la política de la mano de sus padres y los menos, han entrado a la jugada luego de que sus mentores fueran arrestados. Estos son los hijos de la política que siguen la tradición familiar y vuelven para estas elecciones en 2023.

Baldizón

Jorge Eduardo y Manuel Antonio Baldizón Vargas, hijos de el ex diputado y ex presidenciable Manuel, entraron al ruedo político. Tras la captura y encarcelamiento de que su padre, “Manuel” Baldizón Méndez reo número 19167-104, fuera condenado a 50 meses de cárcel en McRae, Georgia, Estados Unidos, por haber recibido dinero del narcotráfico. Mientras que, en Guatemala, se le investiga por el caso ODEBRECHT, donde más de Q18 millones fueron entregados a diputados, incluido Baldizón, de acuerdo con las investigaciones del MP, los juniors de Manuel quieren seguir sus pasos. 

Los Baldizón Vargas, quienes vieron como su padre fue condenado y luego el patrimonio familiar se vio afectado por la corrupción de su padre, pues a la fecha a 72 inmuebles, 26 vehículos y dos cuentas bancarias se les ha levantado medida cautelar con miras a la extinción de dominio, insisten en participar con un proyecto político CAMBIO. Y para ello se han colocado como secretarios generales adjuntos en las elecciones internas celebradas en agosto pasado. 

Los Juniors de Arzú

Roberto y Álvaro Jr., Arzú son hijos del expresidente Álvaro Arzú Irigoyen. De madres distintas, los dos llevan la política en la sangre y hoy sus aspiraciones políticas los colocan en la mira de agrupaciones que buscan aprovecharse del apellido para ganar algunos votos. Roberto, el mayor, ha hecho gala de sus dotes politiqueros con ofrecimientos que parecieran irreales. “Energía eléctrica gratuita, mano dura contra la delincuencia y una redistribución del gasto público para financiar proyectos sociales”, son algunos de sus compromisos. Hoy busca participar como candidato por el partido PODEMOS.

De sus andanzas durante el gobierno de su padre Álvaro AI (1996-2000), se le recuerda por escándalos y señalamientos de corrupción. Los excesos siempre rodearon al Jr., como se le llamaba. Noches de juergas interminables, casas en la playa (donde el AC se mantenía encendido, aunque el Jr. no estuviera), denuncias de edecanes que habría sido acosadas por Arzú y sus amigos, consumo de licor desmedido y otras sustancias, son algunos de los recuerdos que dejó el Jr. Hoy en su segundo intento por llegar a la presidencia, el Jr. asegura que ha cambiado y que ahora busca hacer país y cambiar las cosas.

Álvaro Jr. (el canelo), heredo de su madre la visión religiosa de la vida. Llegó al congreso por orden de su padre y se sentó en la silla de la presidencia de ese poder del Estado. Pero el tacuche le quedó grande, pues fuera del apellido y luego de que su padre falleciera, este junior perdió el norte y casi el partido. En agosto pasado “El Canelo”, anunció una fallida alianza con la hija de Efraín Ríos Montt, Zury, misma que duro tanto como una desatendida billetera en la zona 1. Y es que personas cercanas a los dos hijos de la política, aseguran que “sus egos no caben en el mismo partido”. Hoy Roberto navega como balsero cubano, con la esperanza de que algún barco político grande le de cabida en su listado de diputados, pues la organización que dejó su padre, de a poco se desbarata y ya no le garantiza una curul en el Congreso. 

La hija de Sandra

Nadia de León Torres, hija mayor de la ex esposa del ex presidente Álvaro Colom Caballeros, se une a la lista de juniors que quieren seguir una trayectoria política en Guatemala, ya su llegada al Parlamento Centroamericano, se debió a un compromiso político y no a un voto a su simpatía. Hoy la mayor de las hijas de Sandra Torres, quiere ser primera dama, como lo fuera su madre durante el gobierno de Colom. De León Torres ha sido la mano derecha de Sandra Torres y se valió de partido para lograr inmunidad en la elección pasada, al convertirse en diputada al PARLACEN. 

Hoy De León Torres ha creado, lo que algunos analistas aseguran es otro vehículo político para aumentar el poder político de su mamá. Junto a su esposo, Rudy Guzmán, han formado el partido político NOSOTROS, donde Guzmán figura como precandidato presidencial y simpatizantes y colaboradores de Torres ocuparán candidaturas a cargos públicos. Y es que según Guzmán no hay relación entre la UNE y Nosotros pues, “ella (Sandra) tiene su organización y nosotros tenemos nuestra organización política muy aparte”

La hija del General

Zury Maité Ríos, hija de Efraín Ríos Montt, ha sido una figura política desde que el FRG llegó al gobierno durante la gestión de Alfonso Portillo. Desde entonces Ríos ha mantenido una lucha férrea por que sele permita participar como candidata a la presidencia de Guatemala. Y es que según el articulo “El artículo 186 de la Constitución regula las prohibiciones para optar al cargo de presidente y vicepresidente de la República… a) el caudillo ni los jefes de un golpe de Estado, revolución armada o movimiento similar, que haya alterado el orden constitucional, ni quienes como consecuencia de tales hechos asuman la jefatura de gobierno… c) los parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad del presidente o vicepresidente, cuando este último se encuentre ejerciendo la presidencia y los de las personas que se refiere al inciso primero de este artículo”, Zury Ríos no puede.

Ríos ha sido muy critica de los gobiernos de turno, sobre temas de gestión y manejo de los recursos públicos. Sin embargo, es importante remarcar que durante el gobierno del partido que lideraba su padre, tampoco se atendieron los problemas que ahora grita a viva voz. Aún peor, aseguran sus detractores, “durante el gobierno del FRG la PNC se corrompió y se puso al servicio del narcotráfico, los puestos de trabajo en el Estado se empezaron a vender y la debacle se agudizó en todo el país”, sostiene un analista. Hoy Ríos espera que un acuerdo amistoso con el gobierno y el espaldarazo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), le valgan para que pueda inscribirse como candidata en las próximas elecciones.