El Vía Crucis de los hondureños por alza del combustible

El alza al combustible y de la energía eléctrica, trajeron el aumento de la canasta básica y la mayoría de hondureños no puede cubrir sus gastos, por lo cual se prevén oleadas migratorias en busca de mejores oportunidades de vida.

Para Mi Gente Informa, Ingrid Antúnez, desde Tegucigalpa, Honduras.

El aumento al combustible, a la energía eléctrica, y por supuesto a la canasta básica   tiene preocupado a los hondureños, ya que el salario mínimo que maneja el país para la clase trabajadora media, no alcanza para cubrir todas las responsabilidades. 

El  14 de marzo,  el diésel, el derivado del petróleo más usado en Honduras, aumentó L. 5.37, por lo que de L. 96.30 paso a L. 101.67 por galón. Por tal razón, en la Secretaría de Energía se  anunció, este mismo lunes, que entrará en vigencia un subsidio del 50 por ciento en la tarifa del diésel por parte del Gobierno.

Aunque esta misma institución promueve una campaña de exhortación a la ciudadanía para implementar medidas de ahorro como: movilización en horas de poco tráfico, evitar desplazamientos innecesarios, o cerciorarse que el vehículo necesita o no cierto tipo de gasolina. 

Intento de apoyo por alza de energía eléctrica

En cuanto a la energía eléctrica según decreto del Gobierno los usuarios que consumen menos de 150 kilovatios al mes, a partir de febrero no pagan su consumo evidenciado en la factura energética, pero hay zonas que definitivamente no alcanzaron este beneficio, porque el aumento fue aplicado en algunos recibos    desde diciembre del 2021. Al  superar los 150 kilovatios, como la mayoría de hondureños, definitivamente son afectados por los altos costos de energía eléctrica.

En ese sentido Jack Arévalo, Miembro de la Junta Directiva de la Asociación Hondureña de Energía Renovable afirmó:  “La energía renovable es la solución para los países de América Latina y en especial para los de Centroamérica, ya que podemos ser autosostenibles, producir nuestra propia energía y con esto lograr ser competitivos con el mundo entero”, aunque esta propuesta es prácticamente imposible de lograr en el corto plazo.

El Gobierno intenta subsidiar el consumo de energía eléctrica, pero el beneficio no llega a todos los hogares.

Todo lo anterior genera un incremento en los productos de la canasta básica y esto provoca un conflicto económico en un alto porcentaje de hondureños, quienes no pueden cubrir con sus salarios el pago de los servicios públicos y apenas subsisten. Por lo mismo es que se producen las oleadas migratorias a otros países en busca de mejores oportunidades de vida.

Por el aumento de la energía eléctrica y el combustible, los precios de la canasta básica se dispararon.