El Salvador vrs Comunidad Internacional

Por German Romero

A partir del 1 de mayo del año 2021 existe una nueva realidad en El Salvador, ese día ocuparon su curul, los nuevos diputados de la Asamblea Legislativa para un período de tres años (2021-2024). La mayoría de ellos son nuevos parlamentarios y políticos.

El pleno está conformado por 56 diputados del partido Nuevas Ideas, instituto político que se estrenó en las elecciones de febrero y se convirtió en la primera fuerza política del país, es el partido del presidente Nayib Bukele.

La segunda fracción con más diputados es la de Alianza Repúblicana Nacionalista ARENA, con 14 miembros, le sigue la Gran Alianza Nacional GANA, con cinco parlamentarios, el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional FMLN, obtuvo cuatro puestos, mientras que el Partido de Concertación Nacional PCN, cuenta con dos representaciones y Nuestro Tiempo, Vamos y Partido Democracía Cristiana cuentan con un diputado.

De todos ellos, los diputados de Nuevas Ideas, Gana, PCN y PDC, se han aliado en la toma de decisiones legislativa, y su estreno en el parlamento fue con la destitución de los cinco magistrados que conforman la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, el máximo ente de justicia del país. También destituyeron de sus funciones, al Fiscal General de la República, todo de ello de manera express con dispensa de trámite.

Esta decisión encendió la alarma de los sectores nacionales y la comunidad internacional que de inmediato se pronunció al respecto, Estados Unidos, la Unión Europa, la Organización de Estados Americanos OEA, la Organización de Naciones Unidas ONU y organismos de derechos humanos fueron parte de quienes expresaron su preocupación por la situación del país centroamericano.

La Vicepresidenta de Estados Unidos Kamala Harris, reaccionó casi de inmediato, externó una profunda preocupación por la democracia en El Salvador, el martes pasado volvió a tocar el tema y dijo que su país debe responder ante la destitución de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, su alocución la hizo en una ponencia virtual ante el Foro Council of the Americas.

También la subsecretaria interina de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Jullie Chung, manifestó su preocupación por la remoción de magistrados, asegurando que una relación sólida se consigue respetando la independencia de poderes.

El congresista Albio Sires, dijo en su cuenta de twitter que el gobierno de Estados Unidos debería disminuir la cooperación hacia El Salvador por las acciones del primero de mayo en el parlamento.

Incluso la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, informó que instaló una sala para monitorear la situación de El Salvador.

“No es de su incumbencia”

Las reacciones inmediatas de la comunidad internacional hicieron eco en el presidente salvadoreño Nayib Bukele que desde su cuenta de twitter se dirigió a ellos, “estamos limpiando la casa… y eso no es de su incumbencia” les escribió.

“A nuestros amigos de la Comunidad Internacional: Queremos trabajar con ustedes, comerciar, viajar, conocernos y ayudar en lo que podamos. Nuestras puertas están más abiertas que nunca. Pero con todo respeto: Estamos limpiando nuestra casa…y eso no es de su incumbencia” escribió el mandatario.

Pero dos días más tarde el presidente Bukele, convocó al cuerpo diplomático acreditado en el país para brindar explicaciones de la destitución de los magistrados y del fiscal general, se supone que esta sería una reunión privada.

Posteriormente Bukele anunció una cadena nacional para el martes a las ocho de la noche, dicha cadena que se transmitió por todos los medios de comunicación del país y redes sociales, era la reunión con los embajadores del lunes anterior, esto sorprendió a los propios diplomáticos.

El primero en reaccionar fue el embajador de Chile en El Salvador, Renato Sepulveda, quien explicó que la cadena nacional había sido la reunión privada grabada un día antes y en la que se acordó que no habría cámaras.

Lo más notorio de la reunión con los embajadores fue que la representación diplomática de Estados Unidos, no atendió el llamado de la presidencia a la reunión. “Me extraña que no estén aquí y me preocupa también” dijo Nayib Bukele.

La situación política en El Salvador se mantiene tensa mientras los diputados continúan aprobando iniciativas de ley sin el consenso debido y de manera rápida. En su segunda sesión plenaria fueron aprobadas reformas a la ley de imprenta que obliga a los periódicos a grabar el costo de los ejemplares, así como a pagar el impuesto al valor agregado por la importación de materias primas, maquinaria y equipo.

Mientras todo ello sucede, El Salvador sigue estando en la mira de la comunidad internacional.