El impulso de los proyectos de agua en El Salvador

Los proyectos enfocados en el agua en El Salvador son una constante, desde la misma Administración de Acueductos y Alcantarillados ANDA, las propias comunidades y también desde la cooperación internacional, el tema se ve como prioritario e importante.

La cooperación de la República Federal de Alemania en El Salvador por ejemplo, ha trabajado durante el tiempo de permanencia en el país, importantes proyectos con énfasis en el agua, uno de ellos ubicado en el municipio de San Juan Talpa, en el departamento de La Paz.

Fue desde hace 24 años que la cooperación alemana trabajo este proyecto que consiste en una planta de tratamiento de aguas residuales que ha llevado beneficio a más de 7,000 personas que residen en San Juan Talpa y zonas aledañas.

La Planta de tratamiento de aguas residuales de San Juan Talpa, fue donada por la cooperación alemana hace 24 años.

Este es un sistema que extrae agua de un pozo de 120 metros de profundidad que construyó la ANDA en los años noventas y que se sitúa en los acuíferos de la sub-cuenca del río Comalapa. Es administrado por la Empresa Municipal San Juan Talpa (EMASALT), empresa municipal descentralizada, que ha firmó un contrato de administración del sistema de agua potable y saneamiento de San Juan Talpa, con la ANDA. 

El sistema de distribución de agua potable, cuenta con 1,930 acometidas domiciliares, de las cuales 1,450 cuentan con medidor y 520 tienen conexión directa. Está compuesto por dos tanques de captación de concreto reforzado de 500 metros cúbicos cada uno, teniendo el sistema una capacidad de 1,000 metros cúbicos en conjunto. 

A partir de la nueva administración de ANDA, es que las autoridades comenzaron con el proceso de mantenimiento de esta planta de tratamiento.

¿Cómo funciona esta planta de tratamiento?

La Planta de Tratamiento de Aguas Residuales trabaja en un proceso de depuración de las agua residuales que pasa por diferentes etapas que son:

Estos son los parámetros para aguas residuales urbanas en la Norma Salvadoreña de Aguas Residuales Descargadas a un cuerpo receptor

Retención en Rejilla

Se retiene todo el material grueso con el fin de evitar que la basura y otro tipo de material sólido y grande pueda afectar el funcionamiento de las bombas, válvulas, aireadores, entre otros. esta rejilla se construyen con barras de 6 mm de grosor y son acomodadas aproximadamente a 100 mm de distancia.

Desanerador

Son unidades encargadas de retener arenas, guijarros, tierra y otros elementos vegetales o minerales que traigan las aguas. Posee dos cámaras que se utilizan alternadamente por lo que a diario deben cambiarse de operación abriendo las válvulas para el drenado.

Canaleta Parshall

Es un dispositivo hidráulico que inicia con una sección convergente seguida de un tramo angosto llamado garganta, el cual lleva el agua hacia un tramo divergente con fondo en descenso y luego ascendente; con esta forma se controla el caudal que entra a la planta permitiendo también que éste sea medido a través de una regla graduada.

Estos son los parámetros para aguas residuales urbanas en la Norma Salvadoreña de Aguas Residuales Descargadas a un cuerpo receptor

Decantador primario

Son aquellos que eliminan los sólidos en suspensión presentes en el agua residual. Los principales procesos fisicoquímicos que pueden ser incluidos en el tratamiento primario son los siguientes: sedimentación, flotación, coagulación–floculación y filtración.

Filtro biológico

Estimula las bacterias aeróbicas contenidas en las aguas servidas, reduce el DBO5, degradando la materia orgánica presente en el agua residual..

Tratamiento secundario

Su finalidad es la reducción de la materia orgánica presente en las aguas residuales una vez superadas las fases de pretratamiento y tratamiento primario.

Gradas de aireación

Consiste en un total de 11 gradas de cemento de aproximadamente 0.40 m de ancho por 0.80 m de largo, las cuales reciben las aguas residuales tratadas por los tratamientos primario y secundario, cuya función es básicamente la oxigenación del agua antes de su vertido al cuerpo receptor, en este caso, el río Comalapa. Se constituye en la última etapa de la planta de tratamiento.

Digestor de Lodos

Esta unidad recibe los lodos provenientes del decantador primario y secundario, se depositan en un tiempo de aproximadamente 30 a 45 días, durante el cual los lodos son digeridos por microorganismos en un proceso anaerobio. En ella se forman diversas capas derivadas del proceso: Un primer sobrenadante de lodos, Aceites y Grasas, la segunda se compone de lodos en proceso de digestión; la tercera y más inferior se forma de los lodos ya digeridos, que serán purgados hacia los patios de secado.

Patios de secado

Los lodos digeridos son depositados en los patios de secado, los cuales tienen como función el reducir sus niveles de agua por acción del sol y el aire principalmente. Tiene tres compartimentos, todos con un fondo falso conformado con bloque de sáltex y arena, que permite el paso del exceso de agua de los lodos hacia unas tuberías ubicadas en la parte inferior.

Las normas que rigen el tema del agua

De acuerdo con información del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), en El Salvador existen 27 instituciones públicas vinculadas con la gestión del agua bajo distintas normativas. 

La ANDA trabaja con el Reglamento Especial de Aguas Residuales y establece en su artículo 7 que toda persona natural o jurídica, pública o privada, titular de una obra, proyecto o actividad responsable de producir o administrar aguas residuales y de su vertido en un medio receptor, en lo sucesivo denominada el titular, deberá instalar y operar sistemas de tratamiento para que sus aguas residuales cumplan con las disposiciones de la legislación pertinente.

Otra norma en El Salvador es la que establece las características y valores permisibles que debe presentar el agua residual para proteger los cuerpos receptores, y distingue entre aguas residuales de tipo ordinario como el agua residual generada por las actividades domésticas de los seres humanos, tales como: uso de servicios sanitarios, lavatorios, fregaderos, lavado de ropa y otras similares; y aguas residuales de tipo especial como el agua residual generada por actividades agroindustriales, industriales, hospitalarias y todas aquellas que no se consideran de tipo ordinario.